Este iba a ser un día totalmente diferente. No se trataba de ver y
admirar parques nacionales asombrándonos ante fenómenos de la naturaleza, sino de disfrutar
de un parque temático, construido enteramente por la mano del hombre y lleno de espectáculos
que nos dejarían asombrados, los Estudios Universal, en una de las ciudades más
grandes y famosas del mundo: Los Ángeles. Madrugamos bastante y nos dirigimos hacia Los Ángeles
por la C.E.99 empalmando con la C.I.5 hasta llegar a la ciudad que representa la meca del
cine. Nos habíamos puesto en marcha tan pronto, pues queríamos llegar al entramado de autopistas
que hay en la ciudad antes de que el tráfico se volviese muy denso. Llevábamos nuestros planos
sobre las autopistas que debíamos ir cogiendo, una vez dentro, y las avenidas por las que
debíamos seguir y no queríamos equivocarnos de salidas, pues un error en Los Ángeles nos podía
hacer perder muchas horas, al margen de que podíamos ir a parar a barrios poco recomendables. No
hubo errores y poco después de las 8 de la mañana ya teníamos aparcado el coche en el enorme
parking de Universal City. El parque aún no estaba abierto y nosotros tendríamos tiempo para
desayunar tranquilamente y, luego, todo un día por delante para disfrutar de sus atracciones.
Una vez abierto el parque, y tras pasar por taquilla, fuimos pasando, una por una, por todas
y cada una de las diferentes y entretenidas atracciones que ofrece, desde la recreación de un
viaje en el coche de "Regreso al futuro" a través de los más variados paisajes, incluídas cuevas
con dinosaurios o por el espacio exterior... o el fascinante espectáculo de "Terminator II" en el
que se mezclan ficción y realidad acompañados de efectos especiales y tridimensionales... o el
infantil viaje sobre una bicicleta de "E.T.", por un decorado de ensueño... sin olvidar la
magnifica representación de "Waterworld" en un teatro descubierto, en la que no faltan multitud
de escenas rodadas por auténticos especialistas, con caídas, saltos, peleas... sobre una gran
piscina que representa un trocito de mar... o las actuaciones, en un teatro, de los animales
que han intervenido en diferentes películas... o espectáculos representando a una serie de
películas famosas rodadas por Universal o espectáculos y actuaciones callejeras. Mención
especial merece el recorrido en autobús que se hace por los Estudios Universal, donde te van
explicando dónde se han rodado muchas de las películas que ya forman parte de la historia del
cine, pasando por los decorados que todavía allí permanecen y por los shows que van representando
en algunos decorados... dejamos casi para el final la atracción de "Parque Jurásico", en la que
sobre una balsa vamos deslizándonos por el agua, pasando por la recreación de un trozo del Parque
Jurásico que reserva para el final una caída libre en vertical, sobre la balsa, de más de 30
metros de altura. El impacto final contra el agua nos empapó totalmente a todos los ocupantes de
la balsa.
Al cerrar el parque, volvimos a por nuestro coche y nos adentramos por las calles de Los
Ángeles. No teníamos preferencias a la hora de seleccionar un hotel, sólo necesitábamos que
no fuese muy caro y que estuviese relativamente cerca, o al menos bien comunicado, con
Hollywood. Nos alojamos en un hotel, de los muchos que hay, cerca de los estudios, en Ventura
Boulevard, al otro lado de la montaña de Hollywood. Una vez conseguido el hotel nos fuimos a
cenar a un cercano restaurante mejicano que nos habían recomendado y después, tras dar una
pequeña vuelta por los alrededores, nos marchamos a descansar.